Guía sencilla para aumentar la RAM asignada a una aplicación en Windows 11

Comprender el impacto de la asignación de RAM en el rendimiento de Windows 11

Modificar la cantidad de RAM dedicada a ciertas aplicaciones en Windows 11 puede marcar una gran diferencia. Esto ayuda a que los programas sean más rápidos y respondan mejor, sobre todo cuando la carga en el sistema es alta. La idea es dar a las aplicaciones que lo necesitan un poquito más de memoria para funcionar sin problemas. Aunque puede parecer complicado, la mayoría de las veces solo requiere abrir el Administrador de tareas o ajustar algunas configuraciones en la propia aplicación—nada demasiado técnico.

Cómo aumentar la RAM para un programa en Windows 11

Si quieres que las aplicaciones más exigentes—como editores de vídeo o videojuegos AAA—funcionen más fluidamente, hay una forma sencilla de conseguirlo. Ajustar la asignación de RAM puede hacer que esas apps funcionen sin retardos, acelerando los tiempos de carga y mejorando la experiencia general.

Primer paso: Abre el Administrador de tareas

Haz clic derecho en la barra de tareas y selecciona “Administrador de tareas” o simplemente presiona Ctrl + Shift + Esc. Otra opción es ir a Inicio > Herramientas de Windows > Administrador de tareas. Este pequeño programa muestra todo lo que sucede en tu sistema, incluyendo qué programas están usando más recursos. Es como abrir el capó de tu computadora para ver qué está pidiendo más gasolina.

Localiza la aplicación que quieres ajustar

Ve a la pestaña “Procesos”, donde aparecen todas las aplicaciones y procesos en marcha. Busca la que deseas priorizar, como Photoshop, o Steam si los juegos son tu pasión. Si das clic derecho, aparecen opciones; prueba a ir a Propiedades para ver la ruta del programa, como C:\Archivos de programa\TuApp\app.exe. No todas las apps necesitan esto, pero si es muy exigente en recursos, vale la pena considerarlo.

Modifica la prioridad de la aplicación

Una vez localizado el app, haz clic derecho sobre él, selecciona “Establecer prioridad” y escoge entre “Alta” o “En tiempo real”. Esto le indica a Windows que esa aplicación necesita más recursos en ese momento. Pero atención—no hay un botón mágico para asignar RAM directamente; simplemente estás cambiando la prioridad, lo que afecta cómo Windows distribuye los recursos. Algunos usuarios prefieren usar herramientas de terceros como Process Lasso para un control más preciso, pero ojo, especialmente con “En tiempo real”, ya que puede afectar la estabilidad del sistema.

Confirma el cambio

Tras escoger la prioridad, haz clic en “Cambiar prioridad” para aplicar los cambios. Esto hace que la app tenga más recursos en ese instante. Ten en cuenta que si no programas que esta configuración quede permanente (mediante scripts, por ejemplo), se restablecerá después de reiniciar.

Explora las opciones de optimización integradas

Algunas aplicaciones tienen sus propias configuraciones para gestionar la memoria. Por ejemplo, Adobe Photoshop permite ajustar el uso de memoria en Editar > Preferencias > Rendimiento. Otras, como juegos o programas de virtualización, ofrecen opciones para modificar la RAM desde sus menús internos. Estas configuraciones pueden mejorar aún más el rendimiento, adaptándolo a lo que estás usando.

Otros trucos para gestionar la RAM en Windows 11

Modificar la prioridad ayuda, pero hay más maneras de mantener tu RAM en buen estado. Primero, asegúrate de tener suficiente memoria física; si solo tienes 8 GB y usas programas pesados, quizás debas considerar una mejora de hardware, como agregar módulos de RAM. Puedes comprobar cuánto tienes ingresando a Configuración > Sistema > Acerca de, o ejecutando msinfo32.exe y revisando “Memoria física instalada”.

También es importante cerrar las aplicaciones que no estés usando. Con Ctrl + Shift + Esc vuelves al Administrador de tareas y puedes terminar procesos innecesarios para liberar memoria. Deshabilitar los programas que se abren automáticamente al inicio en Administrador de tareas > Inicio también acelera el arranque. Además, activar la opción de Compresión de memoria en Windows puede mejorar la eficiencia. Y, si quieres, piensa en mejorar físicamente con más RAM. Abrir la computadora y poner nuevos módulos puede ser una excelente inversión si constantemente alcanzas los límites de memoria.

Por último, mantén tu sistema actualizado. Windows Update trae mejoras que ayudan a gestionar mejor la memoria. Pero ten cuidado con herramientas de limpieza de terceros; usa solo las confiables como CCleaner y evita los limpiadores de registro dudosos que puedan dejar tu sistema en problemas.

Preguntas frecuentes sobre asignación de RAM

¿Puedo hacer que una app use siempre más RAM cambiando la prioridad en el Administrador de tareas?

En realidad, no. Los cambios en el Administrador de tareas son temporales y se revierten después de reiniciar. Para ajustes permanentes, deberías revisar las opciones específicas de la aplicación o usar scripts de inicio si te animas a más riesgo.

¿Es peligroso poner la prioridad de una aplicación en “En tiempo real”?

Puede ser. Esta configuración puede acelerar una app, pero también puede provocar inestabilidad en todo el sistema. Los procesos esenciales podrían ralentizarse, así que lo mejor es reservarlo para tareas no críticas. Si quieres automatizar, puedes usar PowerShell con comandos como Start-Process -FilePath "C:\\Ruta\\De\\App.exe" -Priority Realtime. Usa esto con cuidado.

¿Cómo saber si tengo suficiente RAM para lo que hago?

Comparar tus especificaciones con los requisitos de tus programas es buena idea. Usa el Administrador de tareas para observar el uso de memoria—si frecuentemente superas el 80%, probablemente necesites una ampliación.

¿Y si todo sigue yendo lento?

Empieza cerrando todo lo que no uses. El Administrador de tareas te ayuda a detectar qué programas consumen más memoria. Si aún así sigue lento, la mejor opción es ampliar la RAM o actualizar los programas para mejorar su rendimiento.

¿Todos los programas pueden aprovechar más RAM?

No exactamente. Los programas antiguos o mal optimizados podrían no beneficiarse con más recursos. Lo ideal es consultar la documentación del software o sus foros para recomendaciones específicas.

Puntos clave para gestionar la RAM

  1. Abre el Administrador de tareas (Ctrl + Shift + Esc) y supervisa el uso de recursos.
  2. Busca la aplicación que quieres potenciar y configura su prioridad a “Alta” o “En tiempo real”.
  3. Confirma los cambios; recuerda que son temporales si no usas scripts.
  4. Explora las opciones internas de configuración para mayor personalización.
  5. Si tu equipo no da más, considera una actualización de hardware o cierra programas en segundo plano.

Reflexiones finales sobre el rendimiento de aplicaciones

Aprender a gestionar la RAM en Windows 11 puede ser la clave para mejorar significativamente el rendimiento, especialmente en aplicaciones que consumen muchos recursos. Ajustar prioridades, optimizar configuraciones y considerar mejoras de hardware puede marcar la diferencia. Solo recuerda que estos cambios no siempre son permanentes; una mejora física en la RAM es la manera más segura de evitar cuellos de botella. Así que si eres gamer, editor de vídeo o usas programas exigentes, vigila tu RAM y no dudes en abrir la torre para poner más memoria. Esperamos que estos consejos te ayuden a solucionar esos problemas de lentitud en las aplicaciones.