¿Cómo ver y gestionar las apps que corren en segundo plano en Windows 11? Una guía sencilla

¡Claro! Aquí te dejo una versión más relajada, como si se lo contaras a tu colega en un blog de barrio pero sin perder la info técnica. La idea es que quede natural, cercano, y fácil de entender.

Cómo acceder y controlar las apps en segundo plano en Windows 11

Saber qué apps están corriendo en segundo plano en Windows 11 no es la tarea más divertida del mundo, pero te puede salvar de que tu PC vaya lento o que la batería se agote demasiado rápido. Si notas que tu compu va de mal en peor o que la batería dura nada, quizás es hora de echar un vistazo y limitar esas apps que se mantienen activas sin que te des cuenta. Porque, seamos honestos, ¿quién necesita todas esas apps consumiendo recursos cuando quieres jugar, editar o simplemente navegar tranquilo?

Abre la app de Configuración

Lo primero, entra en Configuración. Es sencillito: dale click al botón de inicio (el logo de Windows que está en la esquina) o pulsa Windows + I. También puedes usar Windows + X y elegir Opciones de energía o seguir navegando desde Configuración si quieres ver más detalles.

Ve a Privacidad y Seguridad

Una vez en Configuración, busca la sección de “Privacidad y Seguridad”. Ahí está todo lo que tiene que ver con qué apps pueden acceder a tus datos y, más importante, qué apps están corriendo en segundo plano. También puedes encontrar esto en Configuración > Privacidad y Seguridad > Apps > Permisos de apps > Apps en segundo plano.
Y si quieres un control todavía más directo, échale un vistazo al Administrador de tareas. Abre con Ctrl + Shift + Esc o clic derecho en el botón de Windows y selecciona esa opción para matar procesos que te estén cascando la paciencia.

Localiza las apps en segundo plano

Desplázate un poquito hasta que veas “Apps en segundo plano” y haz clic. Aquí tienes la lista de las apps que, estando en tu equipo, tienen permiso para seguir funcionando en segundo plano.
Otra forma de verlo es desde Configuración > Apps > Apps instaladas y revisar los permisos de cada una.
Los interruptores que aparecen en esa pantalla son los que puedes usar para apagar esas apps que no quieres que anden en segundo plano. Si no las necesitas, apágalas. Pero ojo: si vas a mover cositas por la raíz del sistema, en carpetas como %LocalAppData% o %AppData%, también puedes encontrar configuraciones avanzadas.

Controla qué apps corren en segundo plano

Ahora sí, la parte interesante: decidir qué apps quieres que siga en marcha y cuáles mejor que descansen. Solo tienes que apagar los interruptores de las apps que no te hagan falta que funcionen en segundo plano.
¿Spotify o tu app de redes? Si no necesitas que estén constantemente actualizándose, déjalas descansar. Si quieres un toque más avanzado, también puedes configurar políticas para desactivar todos los procesos en segundo plano usando gpedit.msc o comandos en PowerShell, pero eso ya para los que se atreven.

Cierra Configuración y deja que los cambios hagan efecto

Una vez que hayas ajustado todo, cierra la ventana de Configuración. Lo bueno es que Windows 11 suele aplicar estos cambios en el acto, sin necesidad de reiniciar.
Pero si después de los ajustes todavía ves que esas apps siguen en su sitio, un reinicio siempre ayuda. O si te mola usar línea de comandos, puedes reiniciar el Explorador con taskkill /f /im explorer.exe y luego start explorer.exe. A veces, eso es el truco que necesita tu sistema para refrescarse.

En resumen, controlar las apps que corren en segundo plano puede hacer que tu PC vaya más rápido y que la batería dure más, especialmente si usas portátil. ¡Así que vale la pena darle una revisada de vez en cuando!

Consejitos para gestionar las apps en segundo plano en Windows 11

No es algo que hagas una sola vez y ya. Lo recomendable es que revises esas apps de vez en cuando para mantener todo pilas. Si notas que tu equipo se ralentiza, revisa qué apps están corriendo y apágalas si no las usas. Los usuarios más avanzados pueden incluso automatizar esto con scripts en PowerShell, usando comandos como Set-ItemProperty.
Eso sí, ojo con desactivar servicios clave de Windows, como Windows Update, porque puede generarte problemas. Siempre investiga qué estás tocando antes de hacer cambios grandes.

Y no olvides que algunas apps, como los mensajeros o las notificaciones, son útiles para estar al día. Puedes gestionar esas alertas en Configuración > Sistema > Notificaciones y acciones. Si una app te molesta mucho, apágale las notificaciones y las actualizaciones en segundo plano. Pero, recuerda, si la necesitas para recibir info importante, vuelve a activarla cuando la necesites.

Preguntas frecuentes sobre apps en segundo plano en Windows 11

¿Sigues con dudas? Aquí te dejo algunas preguntas comunes:

¿Cómo sé qué apps puedo cerrar sin problema?
Revisa las que apenas usas o las que se comen todos los recursos con Administrador de tareas. Si ves que una app consume mucho, quizás es buena idea cerrarla o limitar su actividad en segundo plano.

¿Esto ayuda a ahorrar batería?
¡Por supuesto! Menos apps corriendo en segundo plano significan menos consumo de energía, y eso ayuda a que dure más la batería.

¿Puedo apagar todas las apps que estén en segundo plano?
En teoría sí, pero ojo: hay algunas que no debes tocar, como Windows Defender o el antivirus. Desactivarlas en exceso puede traerte problemas. Mejor revisa una por una y evita desactivar cosas esenciales.

¿Cada cuánto debería revisar estas apps?
Como una vez cada par de meses, o más seguido si notas que tu equipo va lento. Usa las herramientas de rendimiento para tener una idea de qué está pasando.

¿Qué pasa si un app empieza a actuar raro después de desactivarla?
Fácil: vuelve a activarla en configuración o usa comandos para habilitarla de nuevo. Si no, desinstálala y vuelve a instalarla, a veces así se arregla.

Al final, aprender a gestionar las apps en segundo plano en Windows 11 ayuda a que tu sistema vaya ligero y que la batería dure más. Solo tienes que revisar, ajustar y listo. ¡Y seguro notarás la diferencia!