Cómo poner en marcha el Escritorio Remoto en Windows 11: La guía paso a paso

¿Quieres acceder a tu PC con Windows 11 de forma remota sin complicarte la vida buscando entre mil opciones? La verdad, configurar el Escritorio Remoto suele ser bastante sencillo, pero esas pequeñas trabas o dudas que aparecían alguna vez nos hacen querer tirar la toalla. Así que, aquí te paso los pasos básicos — y algunos consejillos para que no te sorprendan luego.

Configurar el Escritorio Remoto en Windows 11 (lo básico y algunos trucos)

Habilitar el acceso remoto no es solo darle a un interruptor. Es asegurarte de que todo esté bien conectado, la red configurada y que no te queden fuera después. Aquí tienes lo que a mí me ha funcionado — aunque a veces se necesita un par de intentos.

Paso 1: Abre Configuración

Pulsa en el Inicio, después en Configuración (el icono de la tuerca). También puedes apretar Win + I y listo, te ahorras navegar menús. Desde ahí, se abre la central de control para la mayoría de cosas. Ojo, porque con algunas actualizaciones de Windows puede cambiarse la ubicación de ciertos menús. Si no ves Escritorio Remoto en Sistema, quizás tengas la edición Windows Pro o Enterprise. En las versiones Home suele estar más escondido o hay que activar alguna función extra.

Paso 2: Ve a Sistema –> Escritorio Remoto

En Configuración, selecciona Sistema, baja un poquito y busca Escritorio Remoto. Si no aparece, revisa qué edición tienes: puedes hacer esto escribiendo winver en el cuadro Ejecutar (Win + R) para comprobar si tienes Windows 11 Pro o Enterprise. La versión Home no soporta esto nativamente, a menos que pongas algún truco.

Paso 3: Activa el Escritorio Remoto

Enciende la opción de Habilitar Escritorio Remoto. Si te salta la advertencia “Esto puede afectar tu seguridad en la red,” solo acepta. En algunos casos te pedirán que confirmes permisos con autenticación a nivel de red—dale sin miedo. Y un consejo, asegúrate de que tu PC no esté en modo ahorro de energía o en sueño cuando quieras conectarte, porque si no, es como golpear a una puerta cerrada.

Paso 4: Anota el nombre de tu PC

En la misma pantalla, verás Nombre del PC. Apúntalo. Ese es el dato que usarás en la app de Escritorio Remoto en el otro dispositivo. Porque, no te voy a mentir, Windows a veces hace las cosas más complicadas y el nombre es clave para que todo conecte sin problema — algo que muchos olvidan y luego se quedan con cara de “¿Y ahora qué?” durante horas.

Paso 5: Revisa tu red y firewall

Este paso a veces pasa desapercibido. Tienes que asegurarte de que tu router no bloquee las conexiones RDP (el protocolo del Escritorio Remoto). Cuando vayas a conectarte desde fuera de tu red local, necesitarás redirigir el puerto 3389. Además, ve a Configuración > Privacidad & seguridad > Seguridad de Windows > Protección de red > Permitir una app por firewall y revisa que Escritorio Remoto tenga permiso. Solo así evitas que la conexión falle y tengas que sacar más cabalas para arreglarlo.

Paso 6: Usa la app de Escritorio Remoto

En el dispositivo desde donde quieres entrar, descarga y abre la app oficial de Microsoft Remote Desktop. Escribe allí el nombre del PC que apuntaste antes. Si estás intentando desde otra red, revisa también tu IP pública y el reenvío de puertos. Si no funciona, prueba con la IP en lugar del nombre, o revisa si tus ajustes de red están bien.

Y ojo, en algunos casos necesitas tener una contraseña configurada en tu cuenta de usuario, porque Windows por seguridad muchas veces no deja acceder sin un código. Así que si todavía no tienes password, te tocará ponerle uno si quieres entrar a distancia.

Trucos para que salga bien

  • Asegúrate de que tu conexión a Internet sea estable. Una red inestable vuelve loco al RDP.
  • Usa una contraseña fuerte en tu cuenta. Ya sé que es básico, pero evita contraseñas fáciles de hackear.
  • Mantén Windows actualizado. Muchas veces estos fallos vienen tras un parche, y un reinicio o actualización soluciona mucho.
  • Si vas a acceder desde fuera, piensa en usar VPN. Porque solo abrir puertos no siempre es suficiente, y en redes públicas mejor ir con más seguridad.
  • Y, por favor, recuerda apagar o desactivar el Escritorio Remoto cuando termines, para no dejar puertas abiertas de más.

Preguntas frecuentes que seguro te haces

¿Puedo conectar si mi PC está en modo sueño?

Normalmente, no. El Escritorio Remoto necesita que tu PC esté despierto y listo. Lo mejor es ajustar las opciones de energía para que no duerma si planeas acceder en ciertos horarios. Si no, será como golpear una puerta cerrada y no recibir respuesta.

¿Es solo para ediciones Pro o también funciona en Home?

En realidad, Windows 11 Home no trae la opción nativa de servidor RDP. Existen trucos, pero son bastante engorrosos y no suelen valer la pena si solo quieres algo simple. Mejor, si puedes, considerar subir a una versión Pro si vas a usar el Escritorio Remoto con frecuencia.

¿Y si olvido el nombre del PC?

Si no lo tienes anotado, en Configuración > Sistema > Acerca de, verás qué nombre le puso Windows a tu máquina. También puedes abrir CMD o PowerShell y escribir hostname para sacarle una duda rápida.

¿Se pueden hacer múltiples conexiones a la vez?

Normalmente, Windows solo permite una sesión por usuario a la vez. Si quieres varias personas conectando, estás entrando en el terreno de Terminal Server o programas de terceros. No suele valer la pena para uso casero, pero si tienes un pequeño equipo, puede funcionar.

¿Es gratis esto del Remote Desktop?

Sí, la app en sí es gratis, siempre que tu versión de Windows la soporte. Pero recuerda que necesitas un hardware decente y buena conexión para que funcione bien.

Resumen rápido (porque no es ciencia de cohetes)

  • Abre Configuración.
  • Ve a Sistema.
  • Selecciona Escritorio Remoto.
  • Actívalo y revisa la red y firewall si hace falta.
  • Apunta el nombre del PC.
  • Desde otra máquina, con la app de Remote Desktop, conéctate usando ese nombre.

Al principio puede parecer un rompecabezas, y sí, a veces todo se complica un poco. Pero cuando lo tienes listo, esa sensación de poder acceder desde donde sea, vale totalmente la pena. Solo acuerda tener cuidado con la seguridad y no dejar abiertas puertas por más de lo necesario. Espero que esto te ayude a no terminar rayado buscando soluciones durante horas. ¡Suerte!