Cómo instalar Windows 11 desde USB y BIOS
¿Quieres darte el salto a Windows 11 o barupar tu equipo? Arrancar desde un USB usando el BIOS puede parecer un poco complicado al principio, pero en realidad es una de las formas más suaves de hacerlo — sobre todo si estás cambiando el disco duro o si tienes un sistema rebeldote que no quiere cooperar. La idea es simple: creas un USB de arranque, le dices al BIOS que lo use como prioridad, y sigues con la instalación de Windows. Suena técnico, pero una vez que entras en marcha, es pan comido.
Crear tu USB booteable
Primero, necesitas un USB con al menos 8GB de espacio. Menos de eso, y corre el riesgo de que te arme lío. Ve a la web de Microsoft y descarga la herramienta de creación de medios para Windows 11. Esa pequeña ayuda se encargará de hacer tu USB bootable sin que te rompas mucho la cabeza — ojo, recuerda que borra todo lo que tengas en el pendrive, así que guarda lo importante antes de empezar.
Una vez bajada, mete ese USB en la compu y abre la herramienta de creación de medios ejecutando MediaCreationTool.exe
. Te va guiando paso a paso: selecciona el USB, descarga los archivos necesarios y los pone en modo booteable. A veces, los nombres en las opciones me dejan con cara de “¿en serio?”, pero en fin… Después de un tiempo, tendrás tu USB listo para la acción.
Entrar en BIOS/UEFI
Ahora, reiniciar tu PC es el primer paso, pero lo importante es pichear en la tecla correcta en el arranque. Normalmente, es F2, F12, Delete o Esc — cada marca tiene su truco. Cuando arranques, estate atento a un mensaje que te indique qué tecla presionar; suele aparecer durante un segundo y desaparece volando. En algunos casos, puedes evitarte esa duda y acceder directamente desde Windows con un comando: ejecuta shutdown /r /fw
en un símbolo del sistema con permisos de administrador, y te manda directo al firmware si tu equipo lo soporta.
Cuando estés en BIOS o UEFI, puede que te sientas en un universo paralelo. Ahí controlas cómo arranca el hardware. Navegar no siempre es fácil — algunos menús parecen sacados de los años 90 y otros son bastante intuitivos. Solo recuerda que tu objetivo es que la PC arranque desde el USB que creaste.
Configurar el USB como dispositivo de arranque
Vamos a cambiar unas cosas. Busca en el menú la opción de arranque, que suele estar en una pestaña llamada “Boot” o similar. Ahí verás todos tus dispositivos: discos duros, USBs, etc. Lo que quieres es poner tu USB en la cima de esa lista. Si usas UEFI, quizás necesites desactivar temporalmente el arranque seguro, para eso busca la opción Secure Boot en la pestaña de Seguridad o Boot y cámbiala a Disabled.
A veces, el USB no aparece enseguida y eso puede volverte loco. Si pasa, quítalo y vuelve a ponerlo en otro puerto — los USB 2.0 suelen ser más fiables para esto. Cuando aparezca en la lista, asegúrate de que esté en la posición número uno, y cambia el orden usando las teclas + o - o el mismo menú para mover las opciones.
Guardar cambios y salir del BIOS
Ya que configuraste el USB como prioridad, no te olvides de guardar los cambios. Busca la opción Save & Exit o simplemente dale a F10. Confirma y listo. A veces parece que estás jugando a la ruleta rusa — ¿funcionará o no? Por lo general sí, pero si BIOS está raro puede que te dé lata más adelante. Si quieres resetear todo, quitar y volver a poner la pila de la placa puede ser una opción.
Luego de guardar, reinicia y cruza los dedos para que arranque desde el USB esta vez. Si todo sale bien, aparecerá el entorno de instalación de Windows 11, y ya podrás meterte en faena.
Cómo seguir con la instalación de Windows 11
Ya en la cara de Windows, la cosa es similar a cualquier instalación: selecciona idioma, región y teclado. Cuando te pregunten, decide si quieres actualizar o hacer una instalación limpia — generalmente, lo más recomendable es la limpia para empezar desde cero.
Sigue las instrucciones en pantalla — es bastante sencillo. Si tienes una clave de producto, ponla ahora o déjala para luego. La instalación copia archivos, configura funciones y te deja oler la nueva interfaz de Windows 11.
Al terminar, el sistema reiniciará y te guiará para personalizar tu perfil, crear cuentas o conectarte a Wi-Fi. Ten paciencia durante las actualizaciones; a veces exageran un poco, pero son importantes. Para revisarlas, entra en Configuración > Windows Update o usa el comando ms-settings:windowsupdate
desde la ventana Ejecutar (Win + R).
Consejos útiles para que todo salga bien
Un par de recomendaciones que te ahorrarán dolores de cabeza: primero, usa un USB limpio y sin nada importante, por si acaso. Checa que tu equipo cumple con los requisitos de Windows 11; no querrás que luego te salte algún error por el procesador o la RAM. La herramienta PC Health Check
de Microsoft te ayuda con eso.
Durante la instalación, mantén el equipo enchufado, porque los cortes de luz en medio pueden arruinar todo. Ten a mano tu clave de Windows 11 por si la necesitas para activar después. Si el BIOS se hace un poco difícil, busca en la web el manual de tu motherboard o consulta foros — todos los BIOS tienen sus trucos. Para entrar en modo UEFI en Windows, ve a Configuración > Sistema > Recuperación, en la sección de Inicio avanzado, y selecciona Reiniciar ahora.
Preguntas frecuentes
¿Qué hago si mi PC no arranca desde el USB?
Primero, revisa si el USB está bien conectado y si en el BIOS está en la lista de prioridad. A veces, el modo UEFI vs. Legacy BIOS hace diferencia; intenta cambiar esas opciones en los menús de arranque. Si sigue sin funcionar, prueba a crear el USB de nuevo, por si el archivo se corrompió.
¿Puedo volver a Windows 10 después de instalar Windows 11?
Sí, pero tienes un plazo limitado: Microsoft te deja volver hasta 10 días después, siempre y cuando no hayas borrado la carpeta Windows.old. En Configuración > Sistema > Recuperación hay una opción para regresar. Si pasa ese tiempo o la carpeta no está, tendrás que hacer una instalación limpia con una ISO o un medio de recuperación de Windows 10.
¿Por qué no aparece mi USB en BIOS?
Lo primero, prueba en otros puertos USB. Algunas motherboards solo reconocen ciertos puertos para el arranque. Revisa que en el BIOS estén activadas las opciones de USB y que los puertos funcionen bien. Si usas UEFI y tu USB aún no aparece, quizás necesites activar el modo CSM (Compatibility Support Module). Actualizar el firmware del motherboard también puede solucionar estos problemas.
¿Cuánto dura la instalación?
De unos 20 a 40 minutos, más o menos, dependiendo de tu hardware, en especial si tienes SSD o HDD. Es un process que requiere paciencia, pero en general no es muy largo. Si ves que se alarga mucho, revisa que todo vaya en orden.
¿Es seguro usar herramientas de terceros para crear el USB booteable?
Lo mejor siempre será usar la herramienta oficial de Microsoft. Algunas herramientas de terceros pueden traer malware o generar USB con errores. Si necesitas usar algo como Rufus
o Ventoy
, descarga desde fuentes confiables y con verificación de checksum. Pero, en general, mejor lo oficial para evitar líos.
En resumen: preparar el USB, entrar en BIOS, ponerlo en prioridad, seguir los pasos de instalación y paciencia. No es un proceso que requiera magia, solo un poco de calma y atención. Al final, tendrás tu Windows 11 listo para usar y, quién sabe, quizás con unas cuantas vueltas en el camino, te queda más claro cómo manejar el BIOS y esas cosas. ¡Ánimo y a por ello!