Cómo cambiar los íconos en Windows 11: Guía paso a paso

Cambiar los íconos en Windows 11 puede ser algo divertido, pero también puede sacar de quicio cuando las cosas no funcionan como esperabas. A veces intentas cambiar los íconos por defecto, como la papelera o este equipo, y no se actualizan. O peor aún, los nuevos íconos ni siquiera aparecen o Windows se resiste a cambiar algunos. Normalmente, el problema está en permisos, en el caché o en cómo Windows maneja los archivos de íconos. Así que si quieres personalizar tu escritorio sin volverte loco descubriendo qué está fallando, aquí te dejo un paso a paso con todos los detalles para que no pierdas el rumbo.

Cómo cambiar los íconos en Windows 11

Método 1: Desde la configuración de íconos del escritorio

Este es el camino clásico, fácil y que funciona bien para los íconos del sistema, como la papelera, este equipo o los iconos de red. Pero a veces, estos ajustes no se guardan o no se ven reflejados hasta que haces alguna otra cosita. Aquí te va cómo hacerlo:

• Haz clic derecho en el escritorio y selecciona Personalizar.
• En la ventana de configuración, ve a Temas y baja hasta hacer clic en Configuración de íconos del escritorio. También puedes acceder más rápido escribiendo shell:Desktop en el cuadro de ejecutar (Windows + R) y pulsando Enter. Esto te lleva directo a la carpeta de tu escritorio, pero para cambiar íconos, mejor usa la opción del paso anterior.
• En la ventana de Configuración de íconos del escritorio, selecciona el ícono que quieres cambiar y pulsa en Cambiar icono. Se abrirá otra ventana con una lista de íconos por defecto, pero también puedes navegar en tu PC para escoger un archivo personalizado, que normalmente tiene extensión .ico.

Cuando elijas un nuevo ícono, asegúrate de que esté en formato .ico. Si tienes una imagen en otro formato, puedes convertirla fácilmente con una herramienta online gratis. Después de elegir, pulsa en OK y luego en Aplicar. Si el ícono no se actualiza inmediatamente, prueba refrescar el escritorio con F5 o incluso reiniciando el explorador de archivos (abres el Administrador de tareas con Ctrl + Shift + Esc, buscas Explorador de Windows y haces clic en Reiniciar). Windows necesita refrescar su caché de íconos, y a veces por eso se atasca.

Método 2: Reconstruir el caché de íconos

Este es como un ‘todo o nada’, pero funciona muy bien cuando los íconos se quedan pegados. Windows guarda una especie de caché con las imágenes de los íconos para cargar más rápido, pero a veces se corrompe o no se actualiza. Borrar y volver a crear ese caché puede arreglar esos íconos rebeldes.

• Abre Explorador de archivos y ve a C:\Users\TuUsuario\AppData\Local\Microsoft\Windows\Explorer. Lo más fácil es escribir %localappdata%\Microsoft\Windows\Explorer en la barra de direcciones.
• Busca archivos llamados iconcache (pueden ser varios). Borra o renombra estos archivos (por ejemplo, añadiendo .bak al final). Recuerda que puede que tengas que mostrar archivos ocultos antes, y para eso en la vista activa la opción Mostrar elementos ocultos.
• Luego, reinicia tu PC o solo reinicia el explorador de archivos desde el Administrador de tareas (como en el paso anterior). La próxima vez que inicies sesión, Windows reconstruirá la caché y probablemente arreglará esos iconos que no quieren cambiar.

Para algunos, esto es clave, porque Windows puede ser muy terco con los cambios en los íconos. A veces, solo reiniciar no basta y hay que limpiar esa caché para que todo funcione bien.

Opción 1: Usa una herramienta de terceros para cambiar íconos

Si andar en pleitos con las configuraciones no va contigo, hay programas como IconPackager o alternativas gratuitas como IcoFX que facilitan mucho el cambio masivo de íconos. Solo recuerda: estas herramientas pueden requerir permisos de administrador y, a veces, interferir con actualizaciones de Windows, así que úsalas con cuidado. Pero la mayoría la recomiendan porque hacen más simple el proceso sin tener que andar buscando archivos a mano cada rato.

Y si nada funciona: Usa System File Checker y restablece Windows

Y si los íconos siguen medio revoltosos, prueba a correr sfc /scannow desde un símbolo del sistema con privilegios de administrador. Algunas veces, los archivos del sistema que manejan los íconos se corrompen y hay que repararlos. Para hacerlo:

• Abre el símbolo del sistema como administrador (haz clic en el menú de inicio, busca y selecciona Windows Terminal (Admin) o Command Prompt (Admin)).
• Escribe sfc /scannow y presiona Enter. Paciencia, esto puede tardar un buen rato en revisar y arreglar archivos.
• Cuando termine, reinicia y prueba a cambiar los íconos otra vez.

No siempre soluciona todo, pero vale la pena intentarlo si Windows actúa raro con los íconos.

Consejos para que la personalización de íconos sea más suave

• Usa íconos con buena resolución, así no se ven pixelados o borrosos, especialmente en pantallas de alta definición.
• Antes de cambiar, haz una copia de seguridad de tus íconos originales o de la configuración, por si quieres volver atrás sin problemas.
• Asegúrate de usar íconos de fuentes confiables, porque a veces los packs gratis pueden venir con malware.
• Verifica que los íconos tengan el tamaño y formato correctos, para que no se distorsionen.
• Y, para que la cosa no se vuelva un caos, no te pases con demasiados íconos personalizados. Mejor mantenerlo sencillo para que no termine siendo un escritorio muy recargado y confuso.

Preguntas frecuentes

¿Puedo volver a los íconos por defecto si cambio de idea?

Claro, solo entra en Configuración de íconos del escritorio y dale a Restaurar predeterminados. Así vuelves a la configuración original en un click.

¿Qué formatos de íconos debería usar?

Lo ideal es que sean archivos .ico. Si tienes PNG o JPG, puedes convertirlos online gratis, pero asegúrate de que tengan buen tamaño, como 256×256 pixeles, para que se vean nítidos en pantallas modernas.

¿Cambiar los íconos puede hacer que mi PC vaya más lento?

Para nada, es solo un cambio visual y Windows maneja muy bien esas configuraciones. Sólo ten cuidado con iconos muy pesados o que vengan de sitios sospechosos.

¿Qué hago si los íconos personalizados no aparecen bien?

Quizá sea un problema de resolución o compatibilidad. Asegúrate de que los íconos sean en formato .ico y que no estén distorsionados por el tamaño. También, volver a construir la caché puede ayudar.

Resumen rápido

• Haz clic derecho en el escritorio, selecciona Personalizar.
• En Temas, entra a Configuración de íconos del escritorio.
• Elige el ícono, dale a Cambiar icono.
• Si te complica, limpia la caché o usa alguna herramienta externa para facilitar.

Para cerrar

Personalizar los íconos en Windows 11 no siempre es pan comido, pero una vez que le agarrás la mano a limpiar cachés y usar archivos correctos, resulta bastante gratificante. Como todo en la vida, a veces toca probar varias cosas y ser paciente, porque Windows puede ser medio esquizofrénico con esas cosas. Pero, en general, jugar con los íconos puede hacer que tu escritorio sea más tuyo, más cool y cómodo a tu estilo. ¡Anímate a experimentar! Y si un icono no se actualiza al instante, un reinicio o limpiar la caché suele arreglarlo en un santiamén. ¡Suerte!