Cómo cambiar la DNS en Windows 11: Guía paso a paso

Modificar la configuración de DNS en Windows 11 es más sencillo de lo que parece—solo hay que saber dónde tocar y qué cambiar. A veces, tu navegación se vuelve lenta, o te topas con sitios bloqueados o que no cargan bien. Cambiar a un servidor DNS más rápido o confiable puede marcar la diferencia, pero muchas veces pasa desapercibido si no andas curioseando en la configuración de red. Es como darle a tu PC una especie de agenda nueva, que puede ahorrarte tiempo y, en algunos casos, ayudarte a acceder a páginas que antes estaban restringidas. No es nada del otro mundo, pero Windows a veces lo pone más complicado de lo que debería. Aquí te dejo una especie de tutorial con algunos tips para hacerlo sin marearte demasiado.

Cómo cambiar la DNS en Windows 11

Cuando cambias la DNS, básicamente le estás diciendo a tu PC que consulte las direcciones web en un servidor diferente, ya sea uno más rápido o con menos congestión. Esto puede hacer que navegar sea más rápido, que streamear videos sea más fluido o que puedas esquivar algunos bloqueos geográficos. La clave está en acceder al menú correcto, cambiar un par de opciones y poner las nuevas direcciones. Lo bueno es que, una vez configurado, todas tus apps y navegadores usan esa DNS al instante—sin necesidad de reiniciar, generalmente. La pega es que Windows no siempre es súper intuitivo con esto, y puede que te toque buscar un poco para dar con el lugar correcto.

Cómo ajustar la configuración de DNS en Windows 11

Abre la Configuración y entra en el apartado de red

  • Haz clic en el Menú Inicio, luego en Configuración. O usa el atajo Windows + I para ir más rápido si estás impaciente.
  • Ve a Red e Internet. Suele estar en la columna de la izquierda o en los apartados principales. A veces, parece que Windows mueve las cosas solo para que te marees un poco.

Elige tu tipo de conexión y entra en sus propiedades

  • Selecciona ya sea Wi-Fi o Ethernet, según lo que uses en ese momento. ¿No estás seguro? Mira el icono de tu conexión. La Wi-Fi suele ser obvia, y Ethernet se ve como un cable conectado.
  • Haz clic en ella y busca Propiedades. Ahí es donde toda la magia de la red sucede, como si fuera el centro de mando de tu conexión.

Edita la asignación de IP y cámbiala a manual

  • Desplázate hasta la sección llamada Asignación de IP y haz clic en Editar. Windows generalmente tiene configurada la opción en DHCP, que asigna IP y DNS automáticamente. Toca cambiarla si quieres poner tus propias DNS.

Activa la opción manual y habilita IPv4

  • En la ventana que aparece, cambia IPv4 de Automático (DHCP) a Manual. En algunos casos, también tendrás que activar IPv6, pero para la mayoría, basta con IPv4.
  • Asegúrate de que IPv4 esté encendido. Eso te da control total sobre las DNS que quieres usar.

Ingresa las IPs de los servidores DNS y guarda los cambios

  • Escribe las direcciones DNS que prefieras. Por ejemplo, los grandes como Google 8.8.8.8 y 8.8.4.4 o Cloudflare 1.1.1.1.
  • Haz clic en Guardar y, si es necesario, reinicia tu conexión. A veces Windows ‘se olvida’ de los cambios, así que apagar y prender la conexión suele ayudar.

¿No estás seguro si funciona? Abre tu navegador y visita Speedtest para ver si la velocidad mejora. También puedes hacer un ping a Google desde la consola con ping google.com. Eso te da una idea rápida si la resolución de DNS va a velocidad de vértigo.

Tips rápidos para jugar con la DNS

  • Antes de hacer cambios, anota cuál tenías. Windows a veces se pone raro y puede que te sirva volver atrás.
  • Escoge DNS confiables—Google, Cloudflare, OpenDNS—que son bastante robustos y seguros.
  • Si después de cambiar algo el internet se vuelve loco, prueba a limpiar la caché de DNS con ipconfig /flushdns en la consola. Algunas veces, las cosas se quedan atascadas.
  • Para comprobar que tu nuevo servidor está funcionando bien, visita DNS Checker y comprueba que se propaga correctamente.

Preguntas frecuentes sobre DNS

¿Para qué sirve cambiar la DNS? ¿Me llegará a mejorar la velocidad de internet?

En esencia, sí. Algunos servidores responden más rápido que otros, así que usar uno más ágil puede acelerar tu navegación. Además, puede ayudarte si tu DNS por defecto bloquea ciertos sitios o tiene problemas raros.

¿Es seguro hacerlo? ¿No voy a arruinar mi conexión?

Mientras uses servidores confiables como Google o Cloudflare, no hay problema. Solo ten en cuenta que, si metes direcciones incorrectas o te pasas de listo, siempre puedes volver a dejarlo en automático en el mismo menú.

¿Puedo regresar si no me gusta el cambio?

Claro. Solo repite los pasos y pon la asignación de IP en Automático. Sin drama, no pasa nada.

¿Hay otras formas de cambiar DNS sin hacerlo manualmente?

Sí, puedes modificar también la configuración en tu router para que todos los dispositivos tengan la misma DNS, o usar VPNs con opciones de DNS integradas. Pero eso ya sería otra historia.

Checklist final

  • Abre Configuración (tecla Windows + I)
  • Ve a Red e Internet
  • Elige tu conexión
  • Haz clic en Propiedades
  • Busca la sección de IP y haz clic en Editar
  • Cámbialo a Manual, activa IPv4
  • Ingresa las nuevas DNS, guarda y verifica si notaste la diferencia

Cierre

Cambiar la DNS en Windows 11 no es ningún misterio, pero sí un truco útil. A veces, puede dar un empujón en velocidad, otras veces te permite esquivar bloqueos o restricciones geográficas. Solo recuerda confiar en DNS confiables como Google o Cloudflare. En general, no lleva mucho tiempo y puede hacer mucho. Y si no funciona, siempre puedes volver a lo de origen. Es bueno tenerlo en tu repertorio por si alguna vez aparece algún problema de conexión raro.

¡Espero que esto te ayude a navegar más rápido o a acceder a sitios que antes estaban bloqueados. Mucha suerte probando distintas DNS, que el internet es un mundo bastante caótico a veces.