Cómo arreglar la pantalla azul en Windows 11: Guía paso a paso

Si estás usando Windows 11 y de repente aparece esa famosa Pantalla Azul de la Muerte (BSOD), es como si tu PC decidiera mandar todo a la mierda en un segundo. No es nada divertido, y peor si te pilla de sorpresa. Por lo general, esto pasa por drivers medio mancos, fallos en el hardware o archivos dañados del sistema — a veces todo junto. Arreglarlo puede parecer un trabalenguas, pero hay unos pasos que normalmente ayudan a sacar esa molesta pantalla azul y volver a poner las cosas en marcha. Haciendo estas comprobaciones no solo arreglas el problema inmediato, sino que también puedes prevenir futuros crashes. Así que te hago un resumen de lo que generalmente funciona y qué tener en cuenta si se complica.

Cómo arreglar la pantalla azul en Windows 11

El objetivo aquí es poner tu PC en modo seguro, detectar qué puede estar causando el problema —como drivers desactualizados o archivos corruptos— y arreglarlo sin volverte loco. Estas soluciones no son infalibles, pero suelen dar la talla para que esa pantalla azul no vuelva a aparecer, al menos por ahora. Vas a tener que navegar en la configuración, quizás actualizar un par de drivers y usar algunas herramientas que Windows trae por defecto. Porque, claro, Windows siempre tiene que complicar las cosas un poquito más.

Fix 1: Entrar en Modo Seguro

Primero, lo básico: entra en Modo Seguro. Es como poner a Windows en modo minimalista, solo lo esencial, para que las cosas raras o los drivers problemáticos no hagan de las suyas. Si te aparece la BSOD al arrancar, prueba reiniciando y presionando varias veces F8 o manteniendo Shift y clicando en “Reiniciar” desde la pantalla de inicio de sesión. En algunos sistemas, quizás tengas que forzar el apagado un par de veces para que aparezca el menú de recuperación automática. Cuando veas las opciones, ve por Arranque avanzado > Solución de problemas > Opciones avanzadas > Configuración de inicio, y dale a Reiniciar. Después, presiona 4 para modo seguro, o 5 si quieres modo seguro con red para poder buscar cosas en línea.
Porque, claro, Windows a veces pone las cosas difíciles, así que ten paciencia si tarda un poquito en cargar la opción segura la primera vez.

Fix 2: Buscar e instalar actualizaciones pendientes de Windows

Una vez en modo seguro, que Windows busque actualizaciones. Muchas veces, las actualizaciones incluyen arreglos para errores que generan la pantallazo azul. Ve a Configuración > Windows Update y haz clic en Buscar actualizaciones. Instala todo lo que tenga pendiente, sobre todo las opcionales o las relacionadas con drivers. Esos parches suelen arreglar incompatibilidades que causan los crashes, especialmente después de actualizar a una versión nueva. A veces, solo actualizar todo limpia esos problemas raros que llevan a reinicios inesperados. En algunas máquinas funcionó tras la primera actualización; en otras, tendrás que reiniciar para que los cambios tengan efecto.

Fix 3: Actualizar drivers

Drivers viejos o corruptos son unos de los culpables más habituales de la BSOD, especialmente los de vídeo o red. Todavía en modo seguro, busca el Administrador de dispositivos (haz clic derecho en el botón de Inicio y selecciona o busca en el menú). Fíjate si hay algún dispositivo con un triángulo amarillo — eso indica que algo no está bien. Haz clic derecho y selecciona Actualizar controlador. Para asegurarte de tener lo último y más seguro, ve directamente a las páginas del fabricante del hardware o de tu equipo. A veces, lo más rápido es bajar los drivers manualmente desde la web en lugar de confiar en la actualización automática de Windows. Para tarjetas gráficas, visita las webs oficiales de NVIDIA, AMD o Intel.
Ten en cuenta que no siempre actualizar los drivers arregla la BSOD — de hecho, alguna actualización reciente puede traer más problemas, así que si notaste que empezó después de un cambio, prueba a hacer un Reversión del controlador.

Fix 4: Revisar archivos del sistema con SFC y DISM

Archivos del sistema dañados pueden ser los responsables de que tu PC se vuelva loca. Para revisarlo, abre un Símbolo del sistema como administrador (busca, clic derecho y “Ejecutar como administrador”). Primero, corre sfc /scannow. Esto revisa los archivos del sistema y los repara si encuentra algo mal. Tómate tu tiempo, puede tardar unos minutos. Si detecta errores que no puede arreglar, ejecuta también dism /Online /Cleanup-Image /RestoreHealth. Este comando arregla daños más profundos que SFC no puede solucionar. A veces, correr SFC de nuevo después de DISM ayuda a eliminar esos errores rebeldes que generan inestabilidad.

No siempre sabes por qué, pero en algunos casos, estos comandos arreglaron los reinicios en bucle después de un par de reinicios. Es raro, pero funciona.

Fix 5: Revisar hardware y RAM

A veces, el problema está en el hardware. Revisa las conexiones: asegurate de que las RAM estén bien colocadas, que los cables del disco duro no estén sueltos y que ningún dispositivo externo esté dando guerra. Si tienes RAM de repuesto, prueba cambiando los módulos uno por uno para ver si alguno está jodido. La memoria RAM defectuosa es una causa común para las pantallas azules. También, puedes hacer un test de memoria: busca Windows Memory Diagnostic y deja que corra. Lo raro es que, si la RAM está floja, puede causar crashes espontáneos, especialmente después de salir del modo sleep o en cargas pesadas.

Un apunte: si tu PC se calienta mucho o la fuente de alimentación no funciona bien, también puede aparecer la BSOD. Usa programas como HWMonitor o Core Temp para vigilar temperaturas si notas que los crashes van en esa dirección.

Cuando termines todo esto, reinicia normal y mira si el problema sigue. Normalmente, actualizar drivers, arreglar archivos dañados y revisar hardware suele solventar la situación. Si aún se cuelga, puede que tengas que seguir investigando o buscar ayuda profesional. Pero, en la mayoría de los casos, esto te devuelve a la senda sin mucho lío.

Consejos para arreglar la pantalla azul en Windows 11

  • Haz copias de seguridad de tus archivos, por si acaso vuelve a pasar.
  • Mantén Windows y los drivers siempre actualizados, especialmente tras grandes actualizaciones o reinstalaciones.
  • Haz análisis de malware de vez en cuando, porque los virus también pueden causar crashes raros.
  • Monitorea las temperaturas y el estado del hardware si los crashes son frecuentes — que no se pase de caliente.
  • Desinstala o desactiva programas de terceros que puedan estar en conflicto con Windows, sobre todo si los crashes empezaron después de instalar nuevos programas o antivirus.

Preguntas frecuentes

¿Por qué mi Windows 11 sigue crashando con pantalla azul?

Normalmente por fallos en hardware, problemas con drivers o archivos dañados del sistema. Seguir estos pasos ayuda a encontrar la causa.

¿Cómo puedo saber el código del error en la pantalla azul?

Cuando se produce la BSOD, anota el código o el mensaje que aparece. Ese dato te puede orientar — por ejemplo, un código como “0x0000007E” suele indicar un problema con un driver.

¿El malware puede causar pantallas azules?

Claro que sí. Los virus pueden dañar archivos del sistema o drivers, provocando inestabilidad. Es buena idea hacer un análisis completo con tu antivirus.

¿Perderé datos si se me queda la pantalla azul?

En la mayoría de los casos, no. Pero si el crash es muy grave, algunos archivos pueden corromperse. Por eso, hacer copias de seguridad regularmente siempre viene bien.

¿Debería reinstalar Windows si sigo teniendo pantallas azules?

Reinstalar Windows es la última opción. Normalmente, otros pasos como actualizar drivers o revisar hardware arreglan el problema sin perder nada.

Resumen

  • Entrar en modo seguro
  • Buscar e instalar actualizaciones del sistema
  • Actualizar o volver a versiones estables de drivers
  • Escanear archivos del sistema con SFC y DISM
  • Revisar conexiones hardware y memoria RAM

Cierre

Que te aparezca la BSOD en Windows 11 puede ser molesto, pero muchas veces se arregla sin tener que formatear o hacer algo muy extremo. La mayoría de los crashes vienen por drivers mal, archivos dañados o hardware flojo, y estos pasos suelen solucionar la tontería esa. Es un gustito ver cómo con unos arreglitos sencillos recuperas la estabilidad, sobre todo porque Windows no siempre ayuda demasiado con eso. Mantén tu sistema actualizado, revisa el hardware y haz backups — esas son tus mejores cartas para evitar dramas en el futuro. Ojalá estas ideas te ahorren unas horas y el equipo quede más estable que antes.