Cómo ajustar la sensibilidad del ratón en Windows 11

¿Ajustar la sensibilidad del ratón en Windows 11? Es bastante sencillo, pero por alguna razón, aún puede resultar confuso. A veces, el control deslizante no funciona como se espera o los cambios resultan inconsistentes, especialmente al cambiar entre diferentes ratones o configuraciones. Así que, si tu puntero se siente demasiado lento o inestable, esta guía te ayudará a configurarlo. Porque, créeme, un ratón que responde correctamente marca una gran diferencia, tanto si trabajas en tareas de precisión como si simplemente navegas sin rumbo. Este proceso no es muy complicado, pero comprender los puntos clave en Windows y quizás algunos trucos de hardware pueden hacer que todo sea más fluido.

Cómo corregir la sensibilidad del mouse en Windows 11

Acceda correctamente a la configuración del mouse

Primero, necesitas acceder a la configuración del ratón sin que parezca una búsqueda del tesoro. La clave está en Configuración. Puedes abrirla haciendo clic en el menú Inicio (o pulsando Windows key) y luego en el icono del engranaje, o simplemente pulsando Windows + Ipara acceso rápido. Una vez en Configuración, ve a Bluetooth y dispositivos (o simplemente Dispositivos en algunas actualizaciones) y busca Ratón a la izquierda. Aquí es donde ocurre la magia, sobre todo si tienes un ratón estándar conectado o uno con software adicional.

Método 1: Ajuste la velocidad del puntero mediante el control deslizante integrado

Esta es la solución rápida y común, y suele marcar la diferencia. En la configuración del ratón, verá un control deslizante con una etiqueta como ” Cambiar la velocidad del ratón” o “Velocidad del puntero del ratón”. Mueva ese control deslizante hacia la izquierda o la derecha según desee un movimiento del cursor más lento o más rápido. La clave es probarlo moviendo el ratón. A veces, los valores predeterminados de Windows no funcionan correctamente debido a un hardware diferente, así que esto suele ser lo primero que hay que ajustar. No se base solo en la pequeña vista previa; desplácese o haga clic para comprobar si funciona correctamente. En algunas configuraciones, esto podría requerir reiniciar o volver a conectar, ya que Windows a veces se vuelve loco con las nuevas configuraciones.

Método 2: Habilitar o deshabilitar la mejora de la precisión del puntero

A veces, lo que altera la sensibilidad no es el control deslizante de velocidad, sino la opción ” Mejorar la precisión del puntero”. Es un poco extraño, pero esta opción afecta la correlación entre el movimiento del cursor y el movimiento físico del ratón, especialmente para quienes necesitan un control más preciso o una respuesta más fluida. Si observa un movimiento inestable o inconsistente, actívela o desactívela en la ventana “Propiedades del ratón”. Para ello, escriba ” Einstellungen maus” en la barra de búsqueda o haga clic con el botón derecho en el icono del ratón en la barra de tareas y seleccione ” Ajustar el tamaño del ratón y del cursor”. En la nueva ventana, haga clic en “Opciones adicionales del ratón” y luego vaya a la pestaña “Opciones del puntero”. Allí verá la casilla ” Mejorar la precisión del puntero”.

Habilítelo si desea mayor control para tareas que requieren precisión, como diseño gráfico. Deshabilítelo si el cursor se siente demasiado sensible o inestable. El efecto varía; esta configuración es bastante imprecisa según el hardware y el uso que se le dé.

Método 3: Verifique la configuración del controlador o software del mouse

Si tu ratón venía con su propio software (como Logitech, Razer o Corsair), no te bases solo en los controles deslizantes de Windows. Abre ese software y busca la configuración de sensibilidad o DPI. Muchos ratones para juegos te permiten personalizar varios perfiles directamente. A veces, la sensibilidad de Windows no es suficiente para ratones con DPI alto, o el software anula los valores predeterminados del sistema. Actualizar el controlador o el firmware del ratón también puede ser útil. Para buscar actualizaciones de controladores, ve al Administrador de dispositivos, busca el ratón en la sección Ratones y otros dispositivos señaladores, haz clic derecho y selecciona Actualizar controlador. A veces, simplemente reinstalar el controlador puede solucionar problemas de sensibilidad inusuales que Windows no puede solucionar por sí solo.

Atención: en algunas máquinas, cambiar estas configuraciones genera errores temporalmente hasta que reinicias o vuelves a conectar el dispositivo, por lo que, si está muy inestable después de los ajustes, reinicia y verifica nuevamente.

Opción 4: Utilizar un truco de registro (avanzado)

No es para todos, pero si nada más funciona, modificar el registro puede ayudar a ajustar la sensibilidad del ratón. Tenga cuidado, ya que manipular el registro puede ser arriesgado. Abra el Editor del Registro (escriba regedit en la barra de búsqueda).Luego, navegue hasta HKEY_CURRENT_USER\Control Panel\Mouse. Aquí encontrará valores como MouseSpeedy MouseThreshold1/ MouseThreshold2. Ajustarlos es un poco complicado; normalmente, se configuran MouseSpeeden 1, MouseThreshold1alrededor de 6, yMouseThreshold2 to around 10 can make the pointer feel more natural. But stats vary, and it’s mostly trial and error.

While this can give you more granular control, it might cause other weirdness if not done properly, so only try this if you're comfortable with registry edits and have backups ready.

Summary

  • Open Settings, go to Devices > Mouse
  • Shift the Pointer Speed slider to the sweet spot
  • Toggle Enhance Pointer Precision on or off
  • Check your mouse’s dedicated software for DPI tweaks
  • If needed, tweak registry settings (be cautious!)
  • Test after each change to see what sticks

Wrap-up

Getting your mouse sensitivity just right can be a bit of a journey thanks to Windows’ weirdness and hardware quirks, but once it clicks, everything feels more natural. Expect to do some fiddling — because of course, Windows has to make it harder than necessary. Usually, a few tweaks here and there will get you close, but if problems persist, it might be worth checking your mouse driver or even trying a different port. Sometimes, just reconnecting the mouse or rebooting after changes does the trick. Fingers crossed this helps someone tune their setup perfectly — it’s always a little satisfying when it finally feels right.